sábado, 13 de diciembre de 2008

Mi confrontación con la docencia

Creo que todos nos hemos enfrentado a situaciones incómodas o difíciles en nuestra profesión en un momento dado, al principio comenté lo que me pasó al inicio de mi camino como docente, los temores que uno tiene van desapareciendo y es normal en algún momento sentirlos, es parte de nuestro ser.

Es difícil al principio pararte frente a un grupo y saber que tienes la tarea de enseñarles y más aún de que ellos aprendan, pero ha valido la pena todo lo que he vivido como docente, han cambiado muchas cosas en mi vida y no solo a nivel profesional, si no también a nivel personal.

Mi aventura de ser maestro


Yo estudié la carrera de Lic. en Comercio Exterior, más tarde la maestría en Administración, y para ser honesta nunca pensé que sería maestra, pero me dieron la oportunidad de trabajar en CONALEP en el ’99, un año después de haberme titulado, y en el 2000 ingresé al CBTIS 103, lo cual para mí fue fascinante y cambió el rumbo de mi vida, pues descubrí mi vocación. Para mí es gratificante enseñar, sentir el deseo de dar lo mejor de mí, claro que al principio no fue nada fácil, sobretodo estar frente a jóvenes que esperan mucho de ti, el desarrollar un programa, el temor a una pregunta que no supiera contestar, pero con el paso del tiempo y con la capacitación que he recibido todo ha sido más sencillo.

Lo que significa para mí ser docente, es servir, ayudar, formar a personas que necesitan todo tipo de orientación, siempre tengo que darme tiempo para apoyarlos y escucharlos cuando es necesario, pues educamos a jóvenes que pasan por una etapa difícil y sumando al ambiente en el que hoy en día se encuentran pues más. Satisfacciones he tenido muchísimas, sobretodo cuando me encuentro con ex –alumnos convertidos en personas de éxito, y pienso “yo contribuí en ello”.

Creo que muchos de nosotros tenemos la oportunidad de conocer a alumnos que hacen la diferencia, a veces uno termina aprendiendo más de ellos, me gustaría que aprovecharan las oportunidades que tienen, como el uso de la tecnología, pues ellos cuentan con herramientas que nosotros ni siquiera imaginamos tener, y es parte de nuestra labor como docente conocer esos recursos, para poder hablar un mismo lenguaje.

Los saberes de mis estudiantes


La mayoría de mis estudiantes utilizan el Internet para obtener información de tareas o trabajos que les solicitan los maestros, pues a ellos se les facilita más conseguir la información de ahí, que ir a buscar un libro u otra fuente. A la mayoría de los jóvenes les gusta bajar música, juegos, fotos y la página preferida es you tube pues observan videos al igual que ellos pueden enviarlos ahí para que todos los vean. Una minoría, socializan con personas incluso, de otros países, creando sus propias páginas (Facebook, metroflog, etc.) para compartir sus fotos, experiencias y para hacer y recibir comentarios, claro que este grupo de alumnos lo hacen porque cuentan con equipo en su casa, por ello es que les da tiempo y oportunidad de hacerlo.

Es importante aprovechar el Internet, pues a ellos les atrae demasiado, pero como su maestra, debo orientarlos en su uso y hacer hincapié en que no todo lo que se muestra es verdadero, incluso puede llegar a ser peligroso. Una estrategia sería el apoyar a mis estudiantes con el correo electrónico, creando uno especial para la clase, y estar en línea en un horario específico para aclarar cualquier duda que tengan, de esta manera ellos pueden sentirse mejor, y preguntar lo que algunos no se atreven a hacer en el salón de clase. Con el uso de esta cuenta de correo, a la que todos tendrían acceso, podrían ellos descargar archivos de lecturas, páginas, formatos, ejercicios, etc.

Esta sería una manera de aprender los dos, aprovechar la facilidad que ellos tienen de accesar y de obtener información, y yo como su maestra orientarlos y guiarlos, además esta manera de enseñar no implica solo estar dentro de un salón, si no que fuera de él, ellos sientan apoyo de mi parte.

jueves, 11 de diciembre de 2008

Introducción

Vivir los cambios y adaptarme a ellos, me van creando experiencias incréibles, la idea de aprender y crear cosas nuevas extiende mi visión en la educación y en mi vida personal. El poder compartir mis conocimientos, y de apreciar los de otros transforma la manera de enseñar y aprender, de tener precisamente una visión extendida, pues nuestras mentes deben ser capaces de comprender y abrirse a nuevos saberes.